Un gran saludo. Bienvenidos
Colegio Técnico Benjamín Herrera,
IED
Ciencias sociales, 7°
Para comprender la conquista de América
Semana 28 de septiembre-2 de
octubre
Actividad
Aprendamos a escribir con
nuestras propias ideas
Instrucciones
Leemos con atención el
siguiente texto, y luego, redactamos un escrito de al menos dos páginas,
guiándonos por las siguientes preguntas.
a. ¿Por qué se dice el llamado “descubrimiento” de
América?
b. Explique los pasos que seguían
los conquistadores para fundar una ciudad.
c. ¿Qué consecuencias tuvo para el
hombre americano la conquista?
d. ¿Por qué se habla de pros y
contras de la conquista?
e. ¿Qué sucedió con los primeros
habitantes de América y por qué fue necesario traer esclavos de África?
f. ¿Qué sucedió con los imperios
más grandes y avanzados de América?
g. Describa las consecuencias que
tuvo el imperio americano a partir de la conquista, y cuál de éstas es visible
en la cultura americana, particularmente en Colombia.
h. Sobre la base de los argumentos
de Ginés de Sepúlveda y Bartolomé de las Casas, identifique dos puntos de
discusión. ¿Quién tiene la razón?
Para comprender la conquista de América
I. ¿Qué sucedió tras el llamado “descubrimiento” de América?
El llamado “descubrimiento” de América trajo
consigo la realización de numerosos viajes de exploración. El pequeño
territorio que Cristóbal Colón había visto era parte de un enorme continente
desconocido por los europeos.
Los viajes dieron inicio a la conquista de América
y a la apropiación y explotación de las nuevas tierras por parte de las
potencias europeas, especialmente por aquellas que tenían costas sobre el
océano Atlántico (España y Portugal).
II.
La fundación de ciudades
Ya en continente americano se dio inicio al proceso
de fundación de ciudades. Para fundar una ciudad se clavaba
una cruz cerca de la picota donde se proyectaba la construcción de la iglesia
principal.
La picota era un tronco que se
clavaba en el suelo y simbolizaba la justicia. Se ponía en el sitito donde más
adelante estaría la plaza.
Una vez que se establecía cuál
era el sitio adecuado, se hacía un plano del lugar, que determinaba dónde se
situarían el fuerte, la iglesia y la plaza. Luego, se repartían los solares por
orden jerárquico.
El fundador y los personajes más
encumbrados se quedaban con los solares cercanos a la plaza.
El fundador realizaba una
apropiación simbólica del sitio cortando un haz de hierbas; luego, retaba a los
presentes a que le impidieran llevar a cabo ese acto.
Por último, levantaba la espada y
bautizaba al lugar con un nombre cristiano. El español y el portugués fueron
las lenguas que se impusieron en estas tierras, y la religión católica, la
única oficialmente aceptada.
En la mayoría de los casos las
ciudades se fundaban en sitios a los que era fácil llegar en barco.
III. Los pros y los contras de la conquista
Gracias al “descubrimiento” y a la conquista,
Europa desarrolló técnicas de navegación, creó nuevas rutas marítimas y nuevos
puertos, perfeccionó las cartas geográficas y se produjo un auge en la economía
española.
Las consecuencias para América no fueron muy
beneficiosas: se propagaron enfermedades que no existían en la región, se
destruyeron las civilizaciones existentes y los pueblos nativos debieron servir
al hombre blanco.
IV. Esclavos nativos e importados
Desde el momento en que los españoles llegaron a
América, la población nativa comenzó a mermar. Las causas fueron muchas; entre
ellas, los enfrentamientos y los trabajos excesivos, a los que los aborígenes
no estaban habituados. Los conquistadores remediaron la situación llevando
esclavos africanos a la región.
V. A la conquista de los imperios americanos
En 1519, un grupo de
hombres comandados por Hernán Cortés llegaron a la costa mexicana y al cabo de
tres años conquistaron el Imperio azteca, una de las más grandes y ricas
civilizaciones americanas.
Los españoles contaban
con sofisticadas armas de fuego (ballestas, morteros, cañones) y también con
caballos y perros de presa, animales desconocidos por los nativos.
La conquista del Imperio inca, por parte de
Francisco Pizarro, afianzó la dominación española en la región. En Colombia
ocurrió lo mismo con los muiscas, una
sociedad avanzada y pacífica que habitaba lo que hoy son los departamentos de
Cundinamarca y Boyacá: Gonzalo Jiménez de Quesada, en menos de dos años, acabó
con esta cultura, sometiendo posteriormente a los sobrevivientes.
VI. Consecuencias para el continente americano
La llegada de los
españoles a América generó grandes cambios en la forma de vida de las
sociedades y en el paisaje del continente americano. Entre estas
transformaciones destacan tres aspectos principales.
a. Nuevas relaciones de poder
Los grupos indígenas
tenían maneras de relacionarse entre sí bastante complejas, que incluían
conflictos, pero también formas de solidaridad e intercambio, que se perdieron
con la llegada de los españoles. Sus sistemas políticos y organizativos
desaparecieron, lo cual produjo una pérdida definitiva de su soberanía.
Los indígenas
fueron tratados como seres inferiores y
su naturaleza humana en muchos casos fue desconocida, por lo que se les negaba
tener derechos similares a los que poseían los europeos.
b. Nuevas ideas y estilos de vida
La economía indígena y sus sistemas sociales fueron
desarticulados y sus tradiciones religiosas duramente atacadas por el
catolicismo. De igual forma, sus perspectivas sobre la vida se modificaron
drásticamente.
Desaparecieron muchas lenguas autóctonas y se
impusieron los idiomas europeos. Fueron destruidas numerosas
producciones culturales de
los pueblos nativos, como obras de arte, artesanías, ciudades, templos y
monumentos.
c. El mestizaje
En los
países colonizados por España se produjo un continuo proceso de mestizaje. Esto quiere decir que una parte
muy importante del encuentro de los españoles con los pobladores indígenas, y
más tarde también con los africanos esclavizados, dio origen a una población
mestiza.
Los
mestizos recibieron una herencia combinada, pues biológicamente juntaban rasgos diferentes,
provenientes de sus padres. El mestizaje asimismo generó múltiples
combinaciones en cuanto a la herencia social y cultural, pues se crearon nuevas
maneras de clasificar a las personas, al tiempo que las cosmovisiones y los
saberes de los pueblos se intercambiaban y surgían nuevas tradiciones.
El mestizaje se dio sobre la base
de relaciones de poder muy desiguales, con expresiones claras de la violencia
que caracterizaron a la conquista y a la colonización y, en gran medida, como
producto de la imposición de la voluntad de los hombres españoles.
VII. El debate sobre la humanidad de los indígenas
La gravedad de la situación de los indígenas obligó
a la Corona española a encontrar una “manera justa” de efectuar la conquista y
así justificar su presencia en América. Por ello, el rey Carlos
V ordenó que una Junta de Consejeros decidiera un método para tratar a
los indígenas.
La Junta sesionó en Valladolid entre 1550 y 1551.
Ante ella se presentaron los religiosos Juan Ginés de Sepúlveda y Bartolomé de
las Casas, quienes defendieron posiciones opuestas sobre la naturaleza de los
indígenas y el derecho de España a dominarlos.
Hubo
debates en pro y en contra del sometimiento indígena:
1.
Ginés de Sepúlveda: Ginés de Sepúlveda fue el
principal defensor ideológico de la ocupación española de América. Consideró
legítimo y necesario el uso de la guerra para conquistar y evangelizar a los
indígenas debido a su“ barbarie”. Sus razones fueron que la “naturaleza
ignorante e inhumana” de los indígenas los hacía reacios a aceptar la
“superioridad natural” de los cristianos europeos. En su concepto, la idolatría
indígena se manifestaba en la práctica de ritos “monstruosos” como el
canibalismo y los sacrificios humanos.
2.
Bartolomé de Las Casas: De las Casas mostró, mediante
las expresiones culturales de los pueblos indígenas, que estos eran seres
racionales. Además, justificó los sacrificios humanos que ellos practicaban
como la más alta expresión de servicio a Dios.
En lo ético, demostró cómo estas sociedades tenían
una moral social rígida que castigaba desde el adulterio hasta el asesinato.
Destacó, asimismo, la preocupación de los incas por los necesitados. En suma,
señaló que los indígenas debían ser respetados y se debía proceder a su
evangelización pacífica.[1]
[1]- Constanza Icaza Castro, Karen Escobar Tapia, Natalia Catalán Ávila, Historia, Geografía
y Ciencias Sociales, Editorial Santillana, Santiago de Chile, 2014, pp. 98-112